Las semillas de chía, Salvia hispanica L., es una planta herbácea anual de la familia Lamiaceae que crece en climas subtropicales. Es originaria de México. La planta puede llegar a medir los dos metros de altura. Tiene unas flores en tonos violetas que son hermafroditas y de las que se obtienen las semillas. Las semillas de chía miden unos 2 milímetros de largo, son ovaladas con tonos que van entre marrón y gris oscuro.
Se sabe que en zonas de México se cultivaban y consumían hace 3.500 años y tradicionalmente se han utilizado en culturas americanas como los mayas o aztecas.
Veamos para qué es buena la chía.
Propiedades nutricionales y medicinales de las semillas de chía
Las semillas de chía poseen fibra soluble (mucílagos), vitaminas con propiedad antioxidante como la Vitamina E, y en menor cantidad vitaminas A y C, también contiene B9 o ácido fólico, B1 o tiamina y B3 o niacina, posee proteína vegetal (contiene todos los aminoácidos esenciales), fitoesteroles, flavonoides, minerales como el calcio, boro, potasio, hierro, cobre, zinc, manganeso, magnesio, carbohidratos y ácidos grasos Omega 3.
Todos estos componentes confieren a la semilla de chía propiedades saciante, antiinflamatoria, antidiabética, cardioprotectora, digestiva, antitrombótica, hipoglucemiante, antiviral, laxante, hipocolesterolemiante, inmunoestimulante, antioxidante.
¿Para qué son buenas las semillas de chía?. Beneficios de consumirlas
Son muy saciantes, manteniéndonos llenos durante más tiempo y retrasando la aparición del hambre
Las semillas de chía son beneficiosas en la dieta para adelgazar
Regulan el azúcar en sangre
Mantienen nuestra piel y cabello en buen estado de salud
Disminuyen la inflamación
Las semillas de chía cuidan nuestro sistema cardiovascular
Combate los radicales libres
Nos ayudan a controlar la tensión arterial
Cuidan de nuestra flora intestinal
Están muy recomendadas para trastornos digestivos
La chía mejora las digestiones
Está aconsejada para personas con anemia
Previenen la osteoporosis
Estimula el buen funcionamiento del sistema inmune
Ayudan a controlar el apetito
Cuidan y fortalecen los vasos sanguíneos
Evitan el estreñimiento al mejorar el tránsito intestinal
Son una excelente fuente de energía
Mejoran los casos de varices y retrasan su aparicón
Por su contenido en ácido fólico son beneficiosas durante el embarazo y lactancia
Mejoran la actividad cognitiva
Están muy recomendadas para deportistas, ya que, favorecen el desarrollo muscular
Fuente: ecoagricultor